Actualmente, el estado de Oaxaca es el principal centro de producción del mezcal en México. La bebida ha tomado suma importancia en los últimos años, gracias a sus características como su sabor, gran variedad de marcas en el mercado y el arraigo cultural.
Elaborar el mezcal artesanal conlleva varios procesos como la selección y corte de agave, cocción, destilado, fermentado y envasado, que dan vida a una de las bebidas espirituosas que prefiere el consumidor, y que puede disfrutar ya sea solo, en cocteles y en múltiples celebraciones.
Los productores de Mezcal Oro de Oaxaca llevan a cabo la siembra sustentable del agave en sus propios campos, sobre todo del tipo espadín, que es la variedad más utilizada para la producción de su bebida. Al momento de cortar un agave, se sustituye inmediatamente por una planta nueva que tendrá que esperar largos años para su proceso de producción de mezcal.
Las plantas se siembran y se cuidan bajo procesos especiales, con técnicas de riego y cuidados por parte de sus cortadores, que día con día cuidan de la tierra y de las plantas por casi 10 años, que darán como resultado esta bebida colorámbar. Mediante estos procedimientos, crecen magueyes fuertes y sin riesgo de plagas.
La siembra sustentable beneficia al agave, ya que la misma planta mantiene las propiedades a la producción del mezcal. Esto aunado a los procesos artesanales con el que es elaborado, se obtienen fibras que sirven como composta para nutrir la tierra.
Mezcal Oro de Oaxaca es una de las marcas más comprometidas en la preservación de la cultura, tradiciones, del apoyo a las comunidades de su estado, pero sobre todo al cuidado al Medio Ambiente, ya que en cada uno de sus procesos artesanales (los mismos de antaño), respetan la naturaleza y ayudan a preservar las especies que habitan sus campos de agave.
Creada por el maestro mezcalero Don José López Escobar, el mayor agricultor de agave y productor de bebidas destiladas en los años 40, comienza con Oro de Oaxaca, una nueva historia en la industria del mezcal, logrando crear el auténtico balance entre el sabor y aroma y que son cualidades que conserva hasta la fecha.