Se acerca la temporada más fría del año donde nos exponemos a bajas temperaturas y nuestra mayor preocupación es mantenernos en calor cubriendo nuestro cuerpo, sin embargo, no ponemos suficiente atención a nuestro rostro y se nos olvida que el frio también quema. Una clara evidencia de que esto pasa es que la piel tiende a resecarse más de lo normal. Sabemos que sin importar que sea verano, otoño, invierno debemos cuidar nuestra piel de los agentes externos, como el clima y la contaminación.
¿Qué le ocurre a tu piel con el frío? Se produce una contracción en las venas y la microcirculación sanguínea lo resiente, ya que existe menor circulación de oxígeno y nutrientes, por tanto, esto produce que la piel luzca reseca y apagada. Por esta razón, debemos hacer énfasis en la rutina de skin care y en qué productos nos aportan más beneficios a nuestra piel.
Un ejemplo de ello es el suero facial, pero ¿qué diferencia tiene de una crema? El suero contiene mayor concentración de ingredientes activos que una crema, además es de rápida absorción, consistencia acuosa y penetra hasta las capas más profundas de la piel. Es un potente aliado de belleza.
Por ello, es importante hacer estos pequeños cambios en la rutina de belleza para minimizar los daños a la piel por bajas temperaturas. Existen opciones como el Suero Facial de Torongia que contiene ingredientes de origen natural como los extractos de toronja que protegen ante el daño oxidativo de los radicales libres, estimula el colágeno y retrasa el envejecimiento de la piel. Además, contiene aceite de hoja de Melaleuca (mejor conocido como aceite de árbol de té) que ayuda a restructurar la piel por su alto nivel de penetración en la dermis.
Ahora que ya agregaste este producto a tu rutina de belleza, es primordial mantener una buena alimentación y procurar no exponer la piel a temperaturas extremas.