Celebra el Día del Maestro convirtiéndote en un master del mezcal con la siguiente clase preparada por el Maestro Mezcalero de ZIGNUM MEZCAL –el mezcal más premiado-, al finalizar el curso serás todo un experto de la bebida más emblemática de Oaxaca.
Origen. Para comenzar debemos conocer el origen de la palabra Mezcal la cual proviene del náhuatl y significa “maguey cocido”. Era tanta la importancia que tenía esta bebida entre las civilizaciones precolombinas que incluso le atribuyeron una deidad, designando a Mayahuel como la Diosa del Maguey.
El origen del mezcal aún no ha sido confirmado pero de acuerdo con el Consejo Regulador del Mezcal (CRM) existen indicios que el proceso de destilación en Mesoamérica ya existía entre los años 1500 y 1000 A.C. por lo que los pueblos prehispánicos ya sabían cómo explotar el agave para crear bebidas destinadas a rituales sagrados.
Creación. El mezcal proviene de la destilación del jugo fermentado del agave, un tipo de maguey, del cual existen 150 especies endémicas de México y únicamente 40 de ellas son las que pueden ser destiladas para la creación de esta bebida espirituosa.
Otro de los datos relevantes del mezcal es la denominación de origen. Únicamente ocho estados de la República Mexicana cuentan con ella: Durango, un municipio de Guanajuato, Guerrero, Michoacán, San Luis Potosí, siete municipios de Tamaulipas, Zacatecas y por supuesto Oaxaca, cuna de ZIGNUM MEZCAL.
Degustación. Es necesario conocer la forma adecuada para la degustación del mezcal, la cual es conocida como la “cata del beso”. Primero, sirves ZIGNUM MEZCAL en un vaso veladora, después preparas la boca produciendo y acumulando una buena cantidad de saliva; después es necesario colocar los labios en posición similar a la adoptada para dar un beso, de esa forma comienzas a dar pequeños sorbos a tu vasoy dejas que el mezcal se diluya con tu saliva y comience a recorrer tu boca, de esa manera podrás percibir los sabores y aromas naturales del agave.
Acompañamiento. Por último, pero no menos importante, el maridaje es el arte de combinar alimentos con bebidas para potencializar los sabores y aromas de ambos, con la finalidad de crear experiencias culinarias únicas en tu paladar y por supuesto, para estas conjunciones el mezcal es ideal. Catarlo con unas rodajas de naranja y sal de gusano, destacarán las notas suaves y sedosas. Si por el contrario, lo que deseas es experimentar propuestas más atrevidas, te invitamos a maridar un mezcal joven con un filete de pescado, para impulsar el sabor cítrico, finalmente el añejo es el complemento perfecto para el ate de guayaba o con tu postre de café o nuez favorito.
Claramente la riqueza del mezcal es muy amplia y debe ser abordada desde distintos panoramas, pero únicamente puede ser entendida desde la experiencia propia. Te invitamos a que seas parte del mundo del mezcal degustando cada una de sus variedades para descubrir la identidad de una de las bebidas espirituosas más emblemáticas de México.