Debo confesarles algo, aunque es la tercer película de John Wick es la primera que veo y de verdad disfrute mucho la historia y la acción que nos trae Keanu Reeves muy al estilo de Búsqueda Implacable, dónde el protagonista por más que sufre y es atacado, siempre sale airoso y con pocos golpes. De verdad reí mucho en algunas escenas dónde usan la comedia accidental para tener un mejor impacto con la película.
Si eres fan de las películas de acción no debes perderte esta nueva entrega de la trilogía.
En el segundo capítulo de John Wick 2 –Pacto de Sangre– vimos cómo nuestro héroe es obligado a volver a su vida de sicario. El gangster Santino D’Antonio ayudó a John en el pasado y ahora le toca a Wick devolverle el favor. Santino encarga al sicario asesinar a su hermana, la que se encuentra a la cabeza de una de las mafias.
El protagonista cumple con la tarea que se le ha encomendado, pero esto despierta un inesperado odio en Santino, que no acepta la muerte de su hermana a pesar de que la deseaba con todas sus fuerzas. De este modo, John Wick comienza a ser perseguido por todas las mafias que simpatizan con el italiano.