Las zonas erógenas son partes del cuerpo que cuando se estimulan nos proporcionan placer. Según el punto que se esté estimulando, este placer es tan intenso que se convierte en un truco infalible para llegar al orgasmo.
Durante siglos, el placer masculino se ha asociado casi exclusivamente al pene, pero no. Hoy sabemos que existen además de las zonas erógenas primarias y secundarias, otras zonas dentro del mapa del placer masculino: Punto P, punto L, zona X… que de estimularse adecuadamente, resultan excitantes para tener un sexo fabuloso.
No veas la localización y estimulación de estas zonas erógenas como una especie de fórmula mágica para alcanzar el máximo placer en tu pareja, ya que cada persona es diferente y lo que a ti puede estimularte a tu pareja no.
Puntos erógenos en el cuerpo masculino
Pene
En esta zona es donde más terminaciones nerviosas se encuentran, por lo que no es de extrañar que sea la más sensible y con un mayor grado de excitación. Sobre todo, el frenillo.
Escroto
Esta pequeña bolsa de piel que se encarga de proteger por completo los testículos. No toda la zona se considera erógena, solo la línea central que une cada una de las mitades del escroto. A esta parte se le conoce como rafe, por lo que toma nota y comienza hoy mismo a probarla.
Ano
La zona de las nalgas, en especial la del ano, es uno de los grandes puntos de este mapa erógeno del hombre. Está más que comprobado que excitar esta parte del cuerpo es una forma de aumentar la libido.
Perineo
Desde el escroto hasta el ano se concentran un gran número de terminaciones nerviosas que podrás excitar. La estimulación del perineo es algo muy frecuente durante los preliminares.
Boca y labios
Aunque tanto la boca como los labios forman parte de las zonas erógenas secundarias, lo cierto es que son de las áreas que más juego dan para encender la libido y el deseo. Besos, lametones, mordiscos y todo lo que puedas imaginar.
Cuello y nuca
¿Quién no ha hecho alguna vez un masaje subido de tono? Si la respuesta es no, toma nota que el cuello y la nuca son dos de las partes que podrás fácilmente excitar en un abrir y cerrar de ojos.
Orejas
Los mordisquitos y lametones en el cartílago suelen gustar tanto a las mujeres como los hombres. Un cosquilleo en forma de excitación invade rápidamente tu cuerpo y no puedes pensar en otra cosa que besar y hacer el amor a esa persona tan especial.
El Punto P
Situado en la próstata, de ahí lo de la P, se podría decir que debido a la intensidad de las sensaciones que produce excitarlo, es el equivalente masculino al punto G de las mujeres. La forma más sencilla de estimular el punto P es a través del ano, esta es la razón por la que durante mucho tiempo ha sido “inaccesible” para muchos hombres que non superado el tabú de beneficiarse de su ano para obtener placer sexual. Los orgasmos y las eyaculaciones que se alcanzan a través de la estimulación del punto P normalmente son más intensas que las habituales.
El Punto L
Existe una forma indirecta de estimular el punto P que consiste en masajear la zona situada entre el escroto y el ano, el llamado perineo. Se trata del punto L y al presionarlo, notaremos que esta presión se transfiere hasta la próstata. Las sensaciones a través del punto L no son tan explosivas como las del punto P, que estimula la próstata directamente, pero al estar estimulándola igualmente, también se pueden alcanzar orgasmos bastante potentes y diferentes a los habituales.
El Punto O
Al hablar del punto O, nos estamos acercando al terreno del sexo tántrico, buscando las conexiones existentes entre el pene y la próstata con partes del cuerpo que aparentemente no tienen nada que ver. El punto O está ubicado justo al final de la columna vertebral, en la punta del coxis y si se masajea, poco a poco se van despertando los nervios internos que lo unen con nuestras zonas sexuales.
La Zona X
Algo parecido pasa con la zona X, que abarcaría la equis que podríamos trazar desde el contorno interior de cada glúteo, cruzándose en el ano y terminando en los laterales del perineo y los testículos.
Es una zona de extrema sensibilidad que en algunos casos, más que excitación, puede darnos muchas cosquillas. Fundamental para los preliminares.
El Punto R
¿Has visto esa línea de piel más oscura que se extiende desde la base del pene, pasa entre medio de los testículos, atraviesa el perineo y acaba en el ano? Pues bien, esa línea tiene un nombre: “rafe”, y se trata de una piel muy fina y sensible. Su estimulación tiene que ser muy suave, casi con un solo dedo o con la punta de la lengua, pero constituye un área perfecta para acariciar como preliminar del sexo oral o la estimulación del punto L o P.
El Punto F
Ubicado en la zona inferior del glande y que abarcaría el frenillo y las partes aledañas del glande. Esta zona debería ser siempre clave en la masturbación, durante la cual se puede estimular con uno o ambos pulgares, y en el sexo oral. Actualmente también existen dispositivos que inciden directamente en esa zona para provocar orgasmos.